A su Majestad el Rey Don. Juan Carlos
-Al presidente del Gobierno Español.
-A
-A la prensa Española.
LOS INQUISIDORES
“El lobo cambia de pelaje pero no de hábitos”
En
Se estudian modos y maneras para conjurar contra los justos, los mansos, los pacíficos y los puros de corazón, arrojando mentiras, vituperios, falsas acusaciones y otras tantas de la misma naturaleza, son estas las costumbres de ciertas instituciones amantes de falsos ideales de Justicia, de Amor y de Fraternidad.
Nos han acusado y siguen haciéndolo, de ser los causantes de suscitar e incitar al miedo, de ser pájaros de mal agüero, de alucinados y sectarios, de fomentar toda clase de males, de ser mensajeros del diablo, de predicar falsas verdades, de ser apocalípticos, de manipular a la juventud y, de llevar nuestras palabras sin esperanza a la desesperación de muchos jóvenes induciéndoles a la droga. Nosotros que hemos luchado y seguimos haciéndolo con todas nuestras fuerzas contra los comerciantes de esta maldita, diabólica y mortal pólvora.
Estos mentirosos inquisidores harían bien a arrepentirse y a desprenderse “El velo del Maya” que cubre sus osamentas de muerte.
Harían bien en no provocar otra vez a aquellos, que mejor que cualquiera de los hombres nos conocen y siguen escrupulosamente nuestra obra, predispuesta al mejoramiento de la humanidad de este Planeta, atrapada en la oscuridad de sus días.
Estén atentos estos oscuros personajes a no poner leña en las brasas del diablo, porque este fuego podría quemar a España entera. Existen sobre
Si se está fraguando una conjura contra aquel que, por derecho y misión se encuentra entre vosotros, para llevar a cabo el cometido celeste. En previsión a lo que tengo y debo de hacer en toda España, es bueno que se sepa que hay una orquestada persecución hacia mi persona…!Muy bien! Será hecha la voluntad del Altísimo. Si la conjura se pone en marcha sea cual sea mi destino entonces tendré la seguridad que comienza la destrucción de España.
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