¡Decidme terrestres! ¿Qué resultado os ha traído en estas jornadas de la juventud, la venida del Papa?
¿Seguridad, la salvación de Cristo o quizás los valores ya perdidos?.
¿Que significado tiene dicho personaje para vosotros?
¿Embajador de Cristo en la Tierra o Dios mismo entre vosotros?
¿Qué significado tiene para vosotros la Iglesia de Pedro?
¿La herencia de Cristo concedida a Pedro para el Vaticano o bien otro concepto más importante y amplio, que es la Humanidad entera?
¿A que se refería el Señor cuando entregó a Pedro las llaves de la Iglesia?
¿Quizás a esta organización llamada Santa Sede? ¿O bien le dio el poder de todo el conjunto de la humanidad para hacer la selección de quienes deberían entrar en el Reino de los Cielos, “Nuevo Reino de Dios en la Tierra”?
¿Qué significado tiene para vosotros humanidad?
¿El resultado y la causa de un Dios débil que todo lo perdona?
El Hombre cree con sus defectos y pecados ser semejante a Dios.
¿Qué creéis que sois? ¿Conocéis la real función que deberíais desarrollar en este Ser Microcósmico que llamáis Tierra?
¿Conseguís pensar que no sois los únicos seres inteligentes en ciento cincuenta billones de Galaxias?
¿Os imagináis que otros seres de la Galaxia, fueran como vosotros terrestres que nutrís el sádico placer de matar, de sufrir y de hacer sufrir. Que nutrís una violencia Luciferina, ya sea sobre el plano físico que sobre el plano psíquico. Que nutre y expresa con sádica satisfacción, egoísmo, violenta el sagrado derecho del prójimo y de cuanto existe para volver alegre la vida, sana e iluminada de constructiva conciencia prerrogativa.
El hombre de este planeta le satisface la muerte violenta y todo aquello que vuelve tenebrosa, infeliz y dolorosa la existencia, pero es cierto, real y verdadero, que todo cambiará, todo se limpiará de nuevo, purificado a fin de que este planeta sea regenerado y puesto en condiciones ideales, en un perfecto equilibrio hacia los confines de la dimensión Superior y nadie ni nada podrá detener este previsto proceso evolutivo porque es la Ley Omnicreante quien la determina.
Ni siquiera el Papa y el conjunto de sus seguidores con plegarias prerrogativas detendrá lo que Dios ha determinado.
Sabed hombres que las religiones, los ritos y todo cuanto se practica para volver mejor y consciente “al hombre “ son manipulaciones Luciferinas que engañan con el fin de que el hombre crea que puede hacer a Dios a su imagen y semejanza.
¿Creéis que puede ser igual que vosotros? Cuando la inmoralidad, la sodomía y la bárbara sanguinaria violencia, la corruptibilidad de los valores materiales y espirituales que es la sed inextinguible de desarmonizar y destruir los indispensables equilibrios de los valores naturales, las guerras, la revolución del poder de tiranía son los frutos de vuestra humana cultura.
¿Qué son entonces, habitantes de la Tierra, estos valores que habéis edificado?
¿Son de Dios o de Satanás?
Yo os digo que son de Satanás Pero es cierto, ciertísimo, que el tiempo se ha acortado y la cuenta atrás se ha estrechado a punto de finalizar
Jacobo